10 Beneficios de Construir con Cáñamo

El hempcrete, u hormigón de cáñamo, está marcando un antes y un después en la industria de la construcción. Este innovador biomaterial combina cáñamo, cal y agua para ofrecer una solución sostenible y eficiente que transforma edificaciones en espacios más saludables, económicos y respetuosos con el medio ambiente. A continuación, exploramos con mayor detalle los beneficios que hacen del hormigón de cáñamo una opción revolucionaria:

1. Lo mejor para la salud

Viviendo en un espacio construido con cáñamo, los virus, bacterias y los hongos, tienen dificultades para proliferar contribuyendo a mejorar la salud de las personas. Es un material libre de VOC (compuestos orgánicos volátiles) y tóxicos.

Además, el cáñamo, a diferencia de otros materiales como el serrín de madera, no desprende polvo, por lo que no entra en contacto en el aire y por tanto, no produce alergías y promueve ambientes interiores saludables.

2. No retiene humedades

Los materiales a base de cáñamo permiten el paso del vapor de agua (coeficiente μ = 3-6), evitando condensaciones y mejorando la calidad del aire interior. La permeabilidad al vapor de los muros hace que el nivel de humedad relativa se mantenga entre 30-60% aportando sensación de frescor.

Al tratarse de un material transpirante, no retiene humedades, libera tanto el agua como el vapor de agua, y consigue que las estancias estén continuamente reciclando el aire y expulsando la humedad y los malos olores.

Beneficios adicionales:

  • Crea una sensación de bienestar en las personas, cambiando totalmente la sensación de frio o de calor.

  • Previene la formación de moho y hongos, problemas comunes en climas húmedos.

  • Ayuda a mantener los muebles y materiales de construcción en mejores condiciones, extendiendo su vida útil.

En términos técnicos, su capacidad de absorción se mide en un 0,8-0,9 g/cm³, lo que lo convierte en uno de los materiales más eficientes en este aspecto.

3. Es energéticamente eficiente

Resistencia térmica e inercia térmica se suman para mantener temperaturas agradables y soportables a lo largo de las estaciones, manteniendo una temperatura constante tanto en verano como en invierno.

En climas templados se consigue calentar la vivienda con medios “mínimos” que son usados muy pocos días al año. El aire acondicionado para generar frío deja de ser necesario.

En climas extremos, los medios necesarios han de tener menos de un 50% de la potencia que se necesitaría en obras tradicionales, y las horas/días de uso se reducen en al menos un 50%.

4. Es carbono negativo durante siglos

Desde su cultivo, hasta siglos después. El cáñamo es un excelente sumidero de carbono, tanto durante su cultivo como en su ciclo de vida como material de construcción. La cal carbonata vuelve a convertirse en piedra con el tiempo, sigue absorbiendo CO2 de la atmósfera y permanece inalterable a lo largo de los siglos. Obras hechas con cal hace 5.000 años permanecen intactas.

Respecto al cultivo del cáñamo, crece en 4 meses, requiere un 70% menos de agua que el algodón y regenera los suelos. Un metro cúbico de hormigón de cáñamo captura hasta 110 kg de CO₂. Además, una hectárea de cáñamo puede absorber entre 9 y 15 toneladas de CO₂ durante su crecimiento, más que muchos bosques.

Es un recurso renovable y biodegradable al final de su ciclo de vida.

5. Es un excelente aislante acústico

Gracias a su estructura porosa, el hormigón de cáñamo actúa como una barrera natural contra el ruido. Pruebas realizadas han demostrado que una pared de 30 cm puede reducir el ruido exterior hasta en 50 dB, lo que lo hace perfecto para viviendas urbanas o cercanas a fuentes de ruido.

Ventajas clave:

  • Absorbe frecuencias bajas y medias, mejorando la calidad acústica de los espacios interiores.

  • Ideal para crear entornos tranquilos en viviendas, restaurantes, oficinas y centros educativos.

6. Es un excelente aislante térmico

El hormigón de cáñamo es un excelente aislante térmico gracias a su baja conductividad térmica, que se sitúa en 0,07 W/m·K. Esto significa que las paredes de hormigón de cáñamo reducen significativamente las transferencias de calor entre el interior y el exterior de un edificio.

¿Qué implica esto para los usuarios?

  • Ahorro energético de hasta un 50% en calefacción durante el invierno y en aire acondicionado durante el verano.

  • Mejora de la eficiencia energética de los edificios, lo que los hace más sostenibles y contribuye a alcanzar estándares como Passivhaus.

Además, este nivel de aislamiento térmico ayuda a mantener una temperatura constante en el interior, aumentando el confort de los ocupantes.

7. Protege contra la radiación

El hormigón de cáñamo actúa como un escudo natural frente a la radiación electromagnética.

Ventajas para la salud:

  • Reduce la exposición a campos electromagnéticos generados por dispositivos electrónicos y antenas.

  • Proporciona un entorno más saludable y seguro, especialmente en zonas urbanas con alta densidad de radiación.

  • Puede contribuir al bienestar general en espacios habitables a largo plazo.

8. Es resistente al fuego

Debido a su densidad, tiene la más alta clasificación de resistencia al fuego. El hormigón de cáñamo ofrece una alta resistencia al fuego, con una clasificación de Euroclase B-s1, d0, que significa que es difícilmente inflamable y no produce humos tóxicos en caso de incendio.

Aplicaciones destacadas:

  • Uso en construcciones de alta seguridad, como escuelas, hospitales o edificios públicos.

  • Protección adicional para viviendas situadas en zonas propensas a incendios forestales.

9. Es resistente a seísmos

Gracias a su ligereza y flexibilidad, el hormigón de cáñamo es altamente resistente a los movimientos sísmicos.

Beneficios estructurales:

  • Reduce las cargas en la estructura del edificio, minimizando el riesgo de colapso.

  • Su capacidad para absorber energía sísmica protege mejor las edificaciones en zonas con alta actividad tectónica.

  • Ideal para proyectos en regiones propensas a terremotos.

10. La absoluta sensación de bienestar

La sensación de confort solo se consigue dentro de ciertos límites de temperatura y humedad relativa. Por encima o por debajo de ellos se siente malestar. Y eso es precisamente lo que se consigue en una vivienda aislada con cáñamo.

El uso de hormigón de cáñamo en la construcción crea espacios que no solo son eficientes y saludables, sino que también generan una sensación única de confort y bienestar.

El hormigón de cáñamo no solo ofrece soluciones técnicas avanzadas, sino que también redefine la forma en que construimos para cuidar de las personas y del planeta. Sus propiedades lo convierten en el material ideal para quienes buscan calidad, sostenibilidad y bienestar en un solo producto.

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